Por; Jose Ivan Granada J. – Club Rotario Medellín el Poblado
Entradilla: “…. Ahí vienen los Rotarios, son gente buena, siempre dispuestos a ayudar…”
¿Dónde están los Rotarios?, ¿Como hago para hablar con ellos?, preguntaba angustiada Adelina, líder del resguardo indígena al alcalde del municipio de Mutatá – Antioquia. Ella había oído hablar de que en Medellín estaban haciendo una jornada donde operaban a niños nacidos con labio fisurado y/o paladar hendido y quería llevar una bebe de su comunidad para que le corrigieran esta malformación. Cada año, el Club Rotario Medellín el Poblado, en alianza con los rotarios de la Fundación ROTAPLAST de San Francisco - USA y de la Gobernacion de Antioquia, realizan la “Operación 100 Sonrisas”, durante la cual se le hacen cirugías a más de 100 niños, traídos de los municipios del departamento de Antioquia y del Choco. El Problema es el tiempo, pues ya es martes y la jornada finalizaba el jueves siguiente, después de dos semanas de intenso trabajo. No obstante, el alcalde se comunica con el Ingeniero Elkin Granada, Rotario del Club Urabá, quien inmediatamente se pone a la tarea de preguntar a sus compañeros y amigos del CR Medellín el Poblado, si había un chance de atender esta criatura aparecida en último momento. Muy difícil que un rotario diga no ante un requerimiento de esta naturaleza y por el contrario “hacen que las cosas se realicen”; inmediatamente se realiza la conexión con la Gobernacion de Antioquia y Jaime Vargas, coordinador de la logística para trasladar a los niños hasta Medellín, dice que tiene otro niño procedente de San Pedro de Urabá y que la puede recoger de paso al amanecer del día miércoles. Cuando la bebe es revisada por los médicos de Rotaplast, le diagnostican un grave problema de corazón y que, si no se operaba inmediatamente, podría morir en cualquier momento. Nuevamente la magia entra en acción y se consigue la cirugía inmediata en el Hospital San Vicente logrando salvarle la vida al bebe de nuestra historia, encontrándose operada y en recuperación a las 11 de la mañana del día miércoles.
Son muchas las vivencias que pudiéramos narrar, derivadas de la práctica del Rotarismo como una ocasión de servir a quienes más lo necesitan. La magia de Rotary consiste en eso: la respuesta inmediata de un rotario, desde donde menos lo piensas, cuando solicitas o consultas sobre cómo solucionar una necesidad especifica en bien del prójimo. Como en la reciente inundación ocurrida en el Municipio de Venecia – Antioquia,. donde el Club Rotario Medellín, liderado por su presidenta Didier Velez, se apersonó de llevar ayudas de toda índole a los cientos de familias damnificados. Varias semanas después, pasaban otros rotarios por allí y al identificarlos por sus camisas y gorras, se escuchaban comentarios como: “Ahí vienen los Rotarios, son gente buena y siempre dispuestos a ayudar, sin pedir nada a cambio”. Esa es la magia, la unión en un movimiento universal, de “Gente Buena”, cuyo único propósito es hacer el bien; por eso me gusta mucho la frase de uno de nuestros rotarios más queridos, siempre que lo llamas te saluda con su frase:
“Que hay pa´ hacer Compañero?”.
Pero no quiero terminar, sin compartirles otras dos vivencias de la magia de Rotary; y es precisamente en la “Operación 100 Sonrisas” del 2023 y 2024, donde se operaron sendas jóvenes que, el mismo día de su cirugía estaban cumpliendo sus 15 años de edad. Fué muy emocionante, pues tanto las chicas, como sus familias, en medio de las lágrimas de felicidad nos decían que ése era el mejor regalo que una quinceañera podía recibir, al recuperar su sonrisa y la posibilidad de besar.
