Cada año se evalúan los auxilios disponibles y las situaciones que se presentan con los jóvenes en la terminación de sus estudios.
Por PGD Alberto Efrain García
Hace más de 20 años, un grupo de Rotarios de Cúcuta y Bucaramanga, liderados por los PGD Carlos A Rangel, Gonzalo Ardila, Alberto García y el PP Jaime Uribe entre otros, interesados en apoyar a jóvenes de buen rendimiento académico pero carentes de recursos para culminar sus estudios profesionales, se unieron y realizaron un aporte inicial para comenzar una obra que llamaron FONDO ROTARIO PARA LA EDUCACION EN COLOMBIA CARLOS A RANGEL y su sigla FONEDUCAR, en homenaje a un PGD quien falleció antes de ver cristalizada su propuesta.
Los Fundadores de este fondo, realizaron varios aportes personales y vincularon a Rotarios y No Rotarios con el fin de iniciar sus actividades mediante el otorgamiento de un auxilio mensual a jóvenes estudiantes de carreras tecnológicas y universitarias de los Santanderes. A este impulso se unió desde sus comienzos, el CR Bucaramanga, realizando aportes significativos para fortalecerlo y mediante gestiones con Clubes Rotarios del exterior.
Posteriormente, en una Conferencia Distrital desarrollada en la ciudad de Montería, se hizo la presentación de la obra que se realizaba en los dos Santanderes y se propuso por parte de Foneducar que los Clubes del Distrito 4270 apoyaran con una aporte a este Fondo Rotario pero para sorpresas de sus fundadores se aprobó que el aporte fuera permanente. A partir de este momento, FONEDUCAR comenzó a realizar su obra en el distrito 4270 que hoy forma parte del distrito 4271.
Este fondo, siempre ha tenido una estructura administrativa de bajo costo porque se apoya en la gestión administrativa del CR Bucaramanga. Posee una junta directiva conformada por Rotarios del distrito 4271 que se reúnen en forma presencial o virtualmente para definir aspectos de otorgamiento de auxilios económicos y temas relacionados con su administración. La junta directiva tiene como premisa el administrar dineros que son “Ajenos” porque pertenecen a los jóvenes que se benefician de su labor con que se creó.
En sus estatutos de FONEDUCAR se habla del objetivo por el cual fue creado este fondo y manifiesta que es el de promover y fomentar el desarrollo intelectual de la juventud colombiana, ayudar a la comunidad necesitada con un alto coeficiente intelectual, mediante la prestación de servicios en materia de cultura, educación y asistencia social, buscando la comprensión, la solidaridad social, pero especialmente, propiciando la ayuda para realizar estudios superiores, técnicos, universitarios o de postgrado en entidades Educativas Colombianas.
Los aportes de socios ya sean Clubes Rotarios, socios Rotarios, No Rotarios o socios fundadores se integran en un solo fondo que es el motor generador de auxilios económicos. Su manejo se hace con base en la filosofía de La Fundación Rotaria que consiste en que la mitad de lo que se recibe va directamente al otorgamiento de auxilios educativos y la otra mitad se lleva a fortalecimiento del patrimonio y se colocan en inversiones seguras que generan rendimientos que se utilizan para generar más auxilios educativos
Los estatutos de Foneducar solo permiten hacer inversiones de rentabilidad en instituciones del sector bancario o avalado por la Superintendencia financiera. No se admiten inversiones a riesgo como el mercado bursátil u operaciones de alto riesgo financiero que si bien se gana, se puede perder. El patrimonio sirve de garantía para dar cumplimiento a nuestro compromiso de apoyar a los jóvenes estudiantes hasta el final de sus estudios.
A los auxilios educativos no pueden acceder quienes sean socios Rotarios o No Rotarios de FONEDUCAR. Al volverse una obra distrital, todo los auxilios se otorgan a Jóvenes que sean presentados por un Club Rotario del D4270 en programas de educación tecnológica o universitaria en una institución que sea avalada por el ministerio de educación nacional.
La forma de asignar los auxilios se hace mediante un comité de Rotarios que poseen experiencia en gestión universitaria y conocen el proceso de admisión de las mismas. Los criterios son:
El joven tiene la obligación de reportar sus notas al finalizar cada semestre académico. Esta labor la debe realizar por intermedio de su padrino o el CR que lo presentó.
Cada año se evalúan los auxilios disponibles a la fecha y las situaciones que se presentan con los jóvenes en la terminación de sus estudios como es el caso de incumplimiento de compromisos académicos, pérdida de asignaturas o abandono de estudios. Con estos criterios se continúan y se generan nuevos auxilios con base en los dineros recaudados y los rendimientos financieros generados. Para FONEDUCAR es importante que cuando se comienza un proceso de ayuda a un joven y cumple todos los requisitos exigidos de rendimiento académico se debe apoyar hasta la terminación de sus estudios.