Por; LUZ HELENA SOLANO DE SANTOS - PRESIDENTE CLUB ROTARIO SOCORRO HUELLA COMUNERA
En diciembre de 2024, durante una de nuestras visitas regulares al Asilo San Rafael, regentado con tanto amor por las hermanas Dominicas Terciarias de Santa Catalina de Siena, tuvimos la oportunidad de compartir un emotivo desayuno navideño y celebrar la tradicional novena junto a 60 maravillosas albergadas. Fue en ese ambiente cargado de calidez y solidaridad que, al recorrer el pabellón de las postradas, descubrimos con el corazón apesadumbrado el gran gasto diario en pañales desechables, un elemento tan esencial que muchas veces las EPS no logran entregar a tiempo.
Conmovidos por esta realidad, nació la idea de organizar un “PAÑALETÓN” que invitara a toda la ciudadanía a tender una mano amiga. Para nosotros, suplir esta necesidad tan sentida en nuestra comunidad es mucho más que una acción social: es el fiel compromiso de Rotary de hacer el bien, de dar amor y esperanza a quienes más lo necesitan.
En enero, esa semilla de empatía floreció en reuniones de junta directiva y en plenarias, donde se delineó con pasión la organización de este trascendental evento. Pronto se extendió la invitación a la Casa del Mendigo San Pedro Claver, otro refugio de ancianos en nuestra ciudad, para sumar esfuerzos en beneficio de dos entidades de beneficencia que tanto han dado a la comunidad.
El evento se programó para el jueves 13 de marzo. La planeación fue minuciosa y la difusión, un verdadero llamado del corazón a todos los sectores: la Alcaldía, la primera dama, el Batallón Galán, la Policía, los colegios, el poder judicial, los bancos y el comercio local. Cada uno de nosotros, como rotarios, llevamos con orgullo y convicción una carta motivadora, mientras los medios locales, la televisión y la radio se hicieron eco de nuestro llamado. Incluso la tecnología jugó su papel, a través de grupos de WhatsApp y la colaboración del grupo INTERACT y nuestros intercambistas.
La mañana del 13 de marzo nos reunimos en el Parque de la Chiquinquirá, un día marcado por el bullicio del mercado, para hacer oír nuestro mensaje. Con micrófono en mano y el apoyo del Batallón Galán, invitamos a cada ciudadano a ser parte de esta noble causa. Cada pañal donado se convirtió en un abrazo cargado de amor, gratitud y esperanza, demostrando que la solidaridad puede transformar vidas.
Durante el evento, estuvieron presentes delegados de los Asilos San Rafael y San Pedro Claver, quienes, con lágrimas de gratitud, fueron testigos de la unión y el compromiso de una comunidad que no deja a nadie atrás. Al concluir la actividad pasado medio dia, la alegría del deber cumplido se hizo palpable, y la satisfacción de haber convertido la amistad y el compañerismo en una acción de servicio se sintió en cada rincón.
Los resultados hablaron por sí solos: se entregaron 1.049 pañales al Asilo San Rafael y 1.040 al Asilo San Pedro Claver, además de recaudar $5.575.000 en efectivo, suma que se destinará a la compra de este elemento esencial para nuestros queridos ancianos.
Hoy, más que nunca, reafirmamos que el trabajo en equipo y el compromiso del Club Rotario Socorro HUELLA COMUNERA tienen el poder de cambiar vidas. La respuesta solidaria de la comunidad de El Socorro es la prueba de que cuando nos unimos, el cariño y la gratitud pueden iluminar incluso los momentos más oscuros.
Con el corazón lleno de esperanza, planeamos institucionalizar esta campaña, conscientes de la importancia de cuidar y brindar amor a aquellos que, en algún momento, nos cuidaron, ayudaron a crecer y sirvieron a sus familias y a la sociedad, pero que hoy se encuentran solos.
¡Gracias, querida ciudadanía de El Socorro, por ser la magia que hace posible este cambio!